Dispositivo de Admisiones

 

Trabajando desde el psicoanálisis, pensamos la admisión como un "proceso", una serie de entrevistas en donde se intentará ubicar: cual es el motivo que trae el paciente a la consulta, si la demanda de tratamiento es de él o de algún otro (familiar, médico, juzgado, etc), por qué la consulta se realiza "ahora" y no en otro momento.

También se evalúa si el paciente requiere la atención de un profesional de otro servicio (servicio social, asistencia legal, especialista en alguna rama de la medicina, etc), o interconsulta con un psiquiatra.

En la admisión se trabajara sobre la posible "urgencia subjetiva" o inminente, riesgo de vida que requerirá de la internacion como un recurso (en la guardia del hospital).

Estas entrevistas pueden ser individuales o junto al grupo familiar, alternandose a veces estas dos opciones de acuerdo a lo particular del caso.

A veces de estas entrevistas se desprende la derivación a un tratamiento psicológico o en el mejor de los casos la admision tiene como efecto un cambio en la "posición subjetiva" del paciente que consulta, lo que permite dar por finalizado el proceso.

El espacio de la admisión se lo piensa como un lugar que aloje el padecimiento subjetivo, quedando como referencia si el paciente quiere volver para que algo de lo particular que surja pueda ser alojado nuevamente.

 

Este dispositivo fue fruto de una investigación realizada en el "Equipo de Adultos", coordinada por Lic. Jose Luis Berardozzi, y sus integrantes: Lic. Carolina Alonso, Lic. Carolina Batista, Lic. Ana Maria Garcia, Lic. Miguel Vallejos, Lic. Mariela Valverde, Lic. Maria Luisa Perkins, Lic. Silvia Manzini, Lic. Marina Romero, Lic. Ines Tome, Lic. Dolores Urbaneja, entre otros.